Reflexiones
-
Para ser feliz
Muchas veces para ser feliz, es necesario querer ser feliz.
-
Cada anochecer
Cada anochecer es un nuevo regalo que se nos ha entregado.
-
Seguro que alguna vez
Seguro que alguna vez has oído eso de que cada persona es un libro, y que cada cuál tiene su propia historia. Con miles de páginas y llena de capítulos por descubrir. Yo añadiría que también por aprender. Si cada persona es como un libro abierto, por qué no nos leemos más, por qué no nos desciframos más, por qué no nos desciframos más. Es fácil, realmente es fácil hacerlo, sólo hay que decir una palabra: Escúchame…
-
Cundo callar
Cuando callar es consentir… Eso también es una manera de hablar.
-
Aquellos momentos
Guarda bien aquellos momentos inolvidables, vuélvelos a rozar, aunque sea por un instante, agárralos y no los suelte para volver a creer que lo posible no está tan lejos en la distancia.
-
¿Puedes volar?
¿Te has preguntado alguna vez si es verdad que puedes volar?
-
El océano
– Usted perdone – le dijo un pez a otro -, es usted más viejo y con más experiencia que yo y probablemente podrá usted ayudarme. Dígame: ¿Dónde puedo encontrar eso que llaman océano? He estado buscando por todas partes sin resultado. – El océano – respondió el viejo pez – , es donde estás ahora mismo. -i¿Esto?! Pero si esto no es más que agua… Lo que yo busco es el océano, – replicó el joven pez, totalmente decepcionado, mientras se marchaba nadando a buscar en otra parte.
-
Algunas cosas
Algunas cosas, las más importantes, sólo podemos encontrarlas dentro de nosotros mismos, es donde casi nunca nos paramos a buscar.
-
El apego
El apego a ciertas cosas, no te dejará avanzar… A veces para poder volar, es necesario soltar lastre.
-
La puerta correcta
No siempre abriremos la puerta correcta, pero ese no debe ser impedimento para continuar, para no intentarlo de nuevo. Si seguimos buscando, tarde o temprano encontraremos la nuestra.